Jon Goodwin, quien compitió como canoísta en los Juegos de 1972 en Munich, será el primer olímpico en convertirse en astronauta cuando el VSS Unity despegue desde Nuevo México, EE. UU., para un viaje de 90 minutos al espacio el 10 de agosto.
Diagnosticado con Parkinson en 2014, espera que esta emocionante aventura inspire a otros a hacer cosas “anormales”. Goodwin compró su boleto de $250,000 en 2005.
Desde su diagnóstico, ha escalado el monte Kilimanjaro y recorrido en bicicleta. Virgin Galactic señala que será el segundo diagnosticado con Parkinson en volar al espacio.
Goodwin expresó su emoción por esta experiencia que había estado esperando durante tanto tiempo y está agradecido a Virgin Galactic por permitirle realizar este sueño.
Además de Goodwin, en el vuelo también viajarán Keisha Schahaff, de 46 años, y su hija Anastatia Mayers, de 18 años, quienes ganaron un lugar en un sorteo. Serán la primera madre e hija en ir al espacio.
El viaje también tiene un propósito benéfico, ya que recaudará fondos para Space For Humanity, una organización sin fines de lucro que busca enviar a ciudadanos comunes al espacio para darles una “perspectiva más amplia” de los desafíos que enfrenta la Tierra.
Te puede interesar: NASA tiene grandes cosas reservadas para 2023