Tras varios días de interrupción, la NASA ha logrado restablecer el contacto con la sonda espacial Voyager 2, la cual se encuentra a miles de millones de kilómetros de la Tierra en el espacio profundo.
Hace unas dos semanas, los controladores de vuelo cometieron un error al enviar un comando equivocado, lo que ocasionó que las antenas de la sonda se desviaran lejos de la Tierra, perdiendo la comunicación con la nave.
La buena noticia llegó cuando la Red de Espacio Profundo de la NASA, que cuenta con antenas estratégicamente ubicadas en diferentes partes del mundo, captó un “latido” de la sonda de 46 años, señalando que está funcionando correctamente, según lo explicó Suzanne Dodd, gerente del proyecto, en un correo electrónico el martes.
El equipo del Laboratorio de Propulsión a Chorro en California se encuentra ahora trabajando para reposicionar las antenas del Voyager 2, de modo que vuelvan a apuntar hacia la Tierra.
En caso de que el comando no funcione, lo cual es incierto según los controladores, deberán esperar hasta octubre cuando la sonda se reinicie automáticamente. La antena se encuentra desviada solo en un 2%.
Suzanne Dodd mencionó que esperar hasta octubre sería mucho tiempo, por lo que seguirán enviando comandos varias veces hasta lograr el restablecimiento total del contacto con la sonda.
Vale recordar que el Voyager 2 fue lanzado en 1977, junto con su gemelo idéntico, el Voyager 1, en una misión destinada a explorar exoplanetas.
Aunque el Voyager 2 está más rezagado en su distancia, a unos 19.000 millones de kilómetros (12.000 millones de millas) de la Tierra, en comparación con los 24.000 millones de kilómetros (15.000 millones de millas) del Voyager 1, ambos continúan siendo un logro impresionante para la exploración espacial, manteniendo el legado de la NASA en la exploración del espacio profundo. Cabe destacar que cada señal enviada y recibida por el Voyager 2 tarda más de 18 horas en recorrer la distancia entre la nave y la Tierra en cada dirección.