La compañía Stoke Space realizó con éxito un vuelo de prueba de despegue y aterrizaje vertical (VTVL) de su cohete reutilizable de segunda etapa.
El simulacro se llevó a cabo en el sitio de pruebas de Stoke en Moses Lake, Washington, y permitió lanzar con éxito el vehículo de prueba Hopper a una altitud de 30 pies y aterrizar en su zona planificada después de 15 segundos de vuelo.
La prueba demostró con éxito el funcionamiento del novedoso motor de hidrógeno/oxígeno de la empresa, del escudo térmico enfriado regenerativamente y del sistema de control del vector de empuje del acelerador diferencial, así como la aviónica, el software y los sistemas terrestres.
Esta fue considerada la última prueba del programa de demostración de tecnología del Hopper y, según Stoke, esto confirma que su enfoque para vehículos espaciales robustos y rápidamente reutilizables “es técnicamente sólido, hemos obtenido una increíble cantidad de datos que nos permitirán evolucionar con confianza el diseño del vehículo desde un demostrador de tecnología hasta un vehículo espacial reutilizable confiable”.
Otros logros
“También alcanzamos varios hitos de la industria: Stoke realizó la primera prueba de vuelo de un cohete reutilizable de despegue vertical y aterrizaje vertical (VTVL) que utiliza aceleración diferencial para el control de actitud, y realizamos la primera prueba de vuelo de un vehículo de reentrada que utiliza un escudo térmico activo enfriado de forma regenerativa”, explicó la empresa.
“Además, nos convertimos en la empresa que más rápido pasó de la financiación inicial a la demostración de un cohete de despegue y aterrizaje vertical de clase orbital, la segunda empresa del mundo en volar un prototipo de un cohete de etapa superior totalmente reutilizable y apenas la tercera empresa de EE. UU. en desarrollar un motor de cohete de hidrógeno líquido”, agregaron.
Stoke busca diseñar y construir un cohete que sea 100% reutilizable con un plazo de entrega de 24 horas.
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