Continรบan las acusaciones cibernรฉticas contra China: funcionarios estadounidenses y britรกnicos presentaron cargos, impusieron sanciones y acusaron a Pekรญn de una amplia campaรฑa de ciberespionaje.

Las autoridades de ambos paรญses acusaron al grupo de hackers Advanced Persistent Threat 31, o “APT31”, de estar vinculado con el Ministerio de Seguridad de China.

En este sentido, los funcionarios dijeron que los ataques estuvieron dirigidos contra legisladores, acadรฉmicos y periodistas, y a empresas.

Ademรกs, agregaron que la ola de espionaje de los piratas informรกticos, que durรณ mรกs de diez aรฑos, comprometiรณ a contratistas de defensa, disidentes y una variedad de empresas estadounidenses, incluidas compaรฑรญas de acero, energรญa y vestimenta.

Entre los objetivos se encontraban los principales proveedores de equipos de telefonรญa mรณvil y tecnologรญa inalรกmbrica 5G. Ademรกs, los mรกs llamativo serรญa que incluso los cรณnyuges de altos funcionarios y legisladores estadounidenses fueron atacados.

Declaraciones cruzadas

El objetivo de la operaciรณn de piraterรญa global era “reprimir a los crรญticos del rรฉgimen chino, comprometer las instituciones gubernamentales y robar secretos comerciales”, explicรณ la fiscal general adjunta de Estados Unidos, Lisa Monaco.

Los fiscales estadounidenses tambiรฉn dijeron que el pirateo resultรณ en el compromiso confirmado o potencial de cuentas de trabajo, correos electrรณnicos personales, almacenamiento en lรญnea y registros de llamadas telefรณnicas pertenecientes a millones de estadounidenses.

Por su parte, sus pares en Londres acusaron a APT31 deย piratear a legisladores britรกnicos crรญticos con Chinaย y dijeron que un segundo grupo de espรญas chinos estaba detrรกs del ataque al organismo de control electoral britรกnico que comprometiรณ los datos de millones de personas mรกs en el paรญs.

Como era de esperar, los diplomรกticos chinos en Gran Bretaรฑa y Estados Unidos desestimaron las acusaciones por considerarlas injustificadas: la Embajada de China en Londres calificรณ las acusaciones de “calumnias maliciosas y completamente inventadas”.

Gran Bretaรฑa y Estados Unidos impusieron sanciones a una empresa que, segรบn dijeron, era fachada del Ministerio de Seguridad de China vinculada a la actividad de piraterรญa.

“El anuncio de hoy expone los esfuerzos continuos y descarados de China para socavar la ciberseguridad de nuestra naciรณn y apuntar a los estadounidenses y nuestra innovaciรณn”, sentenciรณ el director del FBI, Christopher Wray.

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