Continúan los problemas espaciales para Rusia: este martes, debido a un fallo técnico, debió abortar el lanzamiento de prueba del cohete Angara-A5 desde su cosmódromo de Vostochny minutos antes del despegue.

La decisión se tomó debido a un mal funcionamiento del sistema de presurización del tanque oxidante, explicó el jefe espacial ruso, Yuri Borisov.

El cohete propulsor pesado es el primero diseñado en Rusia desde la caída de la Unión Soviética y se supone que llevará módulos a la órbita para la futura estación espacial rusa y satélites para el sistema de navegación GLONASS.

Según las autoridades, el despegue, que iba a ser el primero de este tipo de cohete en el nuevo sitio de lanzamiento de Rusia, se retrasó 24 horas.

Angara, de 42,7 metros, es capaz de llevar cargas útiles de más de 20 toneladas a órbita y se está desarrollando para reemplazar al Protón M ruso como cohete de carga pesada del país, que ha estado en funcionamiento desde mediados de la década de 1960.

Este será el cuarto lanzamiento del cohete y se produce casi 10 años después de su primer vuelo de prueba.

Debido a su ubicación más cercana al ecuador, Angara-A5 puede llevar una carga útil más pesada a la órbita si se lanza desde Vostochny, el primer y único centro de lanzamiento de naves espaciales ruso posterior a la era soviética.

El cosmódromo se encuentra en los bosques de la región de Amur, en el Lejano Oriente de Rusia, cerca de la frontera con China y a unos 1.500 kilómetros del puerto de Vladivostok.

Más problemas para Moscú

Sin embargo, el nuevo inconveniente deja en evidencia que Rusia pierde terreno en la actual carrera espacial.

Cabe recordar que, en agosto de 2023, la sonda Luna-25, la primera misión lunar rusa en 47 años, fracasó al estrellarse contra el satélite natural.

Además, hace tan solo un par de semanas, la nave espacial rusa Soyuz tuvo que abortar su despegue por un fallo técnico segundo antes del lanzamiento.

Pero, finalmente, despegó con éxito un par de días después a la Estación Espacial Internacional con una tripulación de tres personas y regresó la semana pasada a la Tierra.

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