En un esfuerzo sin precedentes para asegurar la presencia humana en el espacio profundo, la NASA está apostando por la energía de fisión nuclear como solución esencial para alimentar futuras misiones en la Luna y Marte.
Con un panorama que va más allá de la energía solar y otros métodos convencionales, la agencia espacial de Estados Unidos está impulsando proyectos que prometen transformar la forma en que se provee energía en entornos extremos.
La necesidad de una fuente de energía sostenible
La exploración de la Luna y Marte conlleva desafíos singulares en cuanto a la generación de energía.
En la Luna, la noche lunar, de 14 días, y la ubicación en regiones polares de permanencia oscura imposibilitan el uso exclusivo de paneles solares. Asimismo, en Marte, las tormentas de polvo y la menor incidencia de radiación solar complican el funcionamiento de sistemas basados en energía renovable.
Frente a estos obstáculos, la fisión nuclear surge como una alternativa capaz de suministrar energía de forma constante durante 24 horas.
Impulsando la tecnología nuclear: Proyectos y contratos
La apuesta de la NASA por la fisión nuclear se materializa en dos frentes estratégicos.
La primera fase del proyecto para energizar la Luna comenzó en 2022 con tres contratos de US$ 5 millones cada uno. Las compañías seleccionadas fueron Lockheed Martin, Westinghouse y IX, una empresa conjunta de Intuitive Machines y X-Energy, asociada con Maxar y Boeing. Además, contarán con la colaboración de BWXT, Creare y Aerojet Rocketdyne.
Los contratistas fueron desafiados a desarrollar sistemas capaces de generar 40 kW de energía continua durante 10 años sin intervención humana. Este nivel de potencia, equivalente al consumo de 33 hogares terrestres, impulsará hábitats, laboratorios y sistemas críticos en la superficie lunar.
Por otro lado, documentos técnicos recientes de la NASA confirman que la fisión nuclear es la opción preferida para las misiones en Marte.
Con una planificación meticulosa que debe prever viajes de seis a nueve meses y la necesidad de operaciones totalmente autónomas, la energía nuclear se presenta como la combinación ideal de producción energética, resiliencia ante condiciones adversas y reducción de riesgos operativos.

Innovación y flexibilidad en el diseño de reactores
Lindsay Kaldon, gerente del proyecto Fission Surface Power de la NASA, destacó la diversidad de enfoques propuestos en esta primera fase. Con pocos requisitos restrictivos, más allá de la necesidad de generar los 40 kW sin superar una masa de seis toneladas métricas, la agencia fomenta la innovación y la creatividad entre sus socios comerciales.
Los diseños presentados, aún en evaluación, abrirán el camino para la siguiente etapa del proyecto, programada para iniciar en 2025.
En esta fase se licitará la construcción del reactor más seguro y eficiente, que deberá estar listo a principios de la década de 2030.

De la Luna a Marte: Una ruta hacia la autonomía energética
La estrategia “Moon to Mars”, actualizada en el plan arquitectónico 2024 de la NASA, pone a la energía nuclear en el centro de su planificación.
La experiencia que se obtenga en la Luna será fundamental para aplicar esta tecnología en la exploración del planeta rojo. En nuestro satélite natural se someterá a prueba el comportamiento de estos reactores durante un periodo de 12 meses, extendible a otros nueve años.
Las misiones Artemis, con su de objetivo de establecer una presencia sostenida en la Luna, funcionarán como campo de pruebas para validar la eficacia y seguridad de los sistemas nucleares en un entorno hostil.
En Marte, la situación es aún más desafiante. Con demandas energéticas que podrían elevarse hasta cientos de kW a medida que se incrementa el número de astronautas y la complejidad de las operaciones, la fisión nuclear se posiciona como la opción más viable.
A diferencia de los paneles solares, que pueden verse afectados o incluso inutilizados por las tormentas de polvo, un reactor de fisión operará de manera constante, proporcionando la energía necesaria para mantener la vida y el avance científico en el planeta rojo.
Hacia una nueva era de exploración espacial
Al superar las limitaciones de las fuentes convencionales, la fisión nuclear garantiza una fuente de energía continua y abre la puerta a una reducción de costos operativos a largo plazo.
Con la Luna como banco de pruebas y Marte como horizonte, la era de la exploración espacial está a punto de dar un salto revolucionario hacia la autosuficiencia energética.
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