Tal como se informó en Espacio Techo, el pasado lunes un cohete Falcon 9 de SpaceX lanzó la misión de viaje compartido Bandwagon-3. Sin embargo, la novedad de la misión es que Corea del Sur envió su cuarto satélite espía a la órbita. La medida es parte de un esfuerzo por reforzar su capacidad para vigilar a su vecina del norte.
Un Falcon 9 lanzó el satélite 425Sat-3 de Corea del Sur desde Florida. La unidad es un satélite de radar de apertura sintética (SAR). Este es un tipo de plataforma de observación de la Tierra que puede proporcionar imágenes de alta resolución incluso de noche o cuando está nublado.
Según el Ministerio de Defensa surcoreano, el satélite impulsará las “capacidades de vigilancia y reconocimiento de Corea del Sur contra Corea del Norte al asegurar satélites de reconocimiento adicionales”.
El ministerio agregó que el satélite también “fortalecerá las capacidades de la cadena de muerte” (la capacidad de localizar, identificar y atacar objetivos como misiles) al permitir observaciones más oportunas y precisas de la actividad militar de Corea del Norte.
Por su parte, Corea del Norte afirma haber puesto su primer satélite en órbita en noviembre de 2023. Sin embargo, muchos expertos dudan seriamente de dicha afirmación.
Tensión en ascenso en Corea
Corea del Sur lanzó su primer satélite espía en diciembre de 2023 a bordo de un Falcon 9. Seúl tiene un contrato para lanzar un total de cinco satélites con SpaceX.
Se estima que, una vez que se complete su constelación de cinco satélites, el ejército surcoreano podrá vigilar a su vecino del norte cada dos horas.
La nación asiática puso en marcha su propia agencia espacial en 2024, con el objetivo de aterrizar en Marte para 2045.
Tal vez te interese: Corea del Sur y Corea del Norte se desafían mutuamente